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Padrinos y madrinas de lectura en Berlín

Desarrollo de habilidades de lectura y encuentros entre generaciones

La lectura y la conversación fomentan en los niños/as un acceso nuevo e indispensable al mundo y desarrollan su personalidad. El proyecto de padrinos y madrinas crea un espacio que posibilita una convivencia creativa.

El proyecto Padrinos y madrinas de lectura surgió en 2002 en el marco del Foro de Educación de Kreuzberg al hilo de una serie de reflexiones sobre los problemas educativos actuales en las zonas socialmente desfavorecidas. Se basa en el convencimiento de que, en esta época dominada por los medios de comunicación visuales, las niñas y los niños tienen cada vez menos oportunidades de descubrir libremente su entorno, lo que limita sus posibilidades de expresar su mundo a través del lenguaje. El proyecto persigue reforzar las habilidades de lectura y lenguaje de los niños y brindar a personas de todas las edades, especialmente aquellas que no están laboralmente activas, la oportunidad de realizar una actividad socialmente útil. Al mismo tiempo, crea espacios de comunicación intercultural e intergeneracional a través del proceso de lectura y de las vivencias colectivas.

Actualmente, el proyecto Padrinos y madrinas de lectura está funcionando en escuelas de Berlín-Schöneberg y Berlín-Moabit. Toda persona que disfrute de la lectura o de la comunicación con los niños y niñas puede ser padrino/madrina. Se realizan sesiones de lectura de dos horas semanales con grupos de uno a tres niños/as en el aula de clase, con el acuerdo del profesor/a correspondiente. Dos veces al año se celebra un encuentro en el que los padrinos y las madrinas tienen la posibilidad de poner en común sus experiencias y recibir apoyo profesional.

Además del acompañamiento de los padrinos y las madrinas de lectura, el IPF ha puesto en marcha un proyecto para fomentar la lectura en familia. Las familias reciben cofres de lectura con libros en alemán o en dos idiomas (por ejemplo, turco y alemán, o árabe y alemán), juegos, audio libros y DVD, que pueden conservar durante dos semanas.